Tendré que poner todo mi empeño en conseguir centrar mi atención en las pequeñas cosas de la vida que me provocan esas pequeñas sonrisas que evitan que caiga una y otra vez en la absurda melancolía que me provoca tu ausencia. Te echo tanto de menos que hasta me duele respirar. E intento endulzar todas esas lágrimas que no me permito derramar. No me quedan vidas en las que encerrar todo el amor que te he regalado.
1 comentario:
La última frase... Me ha impactado.
Si encuentras el antidoto de esa melancolia, avisame porfavor..
Besos.
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