lunes, septiembre 29, 2008

Lucía




Hoy es 29 de septiembre y hace un año se me cayó el mundo. Pero no me apetece hablar de ello. Porque estoy empezando a alzar el vuelo y no quiero recaer pensando en cómo comenzó todo, en por qué hoy debería ser un día duro porque el primer aniversario de cualquier adiós nunca es fácil. Y menos cuando perder a mi abuela sobre todo implicó empezar a perderme a mí misma. Y no me apetece revolcarme en mi dolor. Hoy sólo me apetece hablar de Ella.


De Lucía. Mi pequeña. Todavía la recuerdo recién llegada a aquellas tardes de gimnasia rítmica, todavía recuerdo las bromas de las Lelly Kelly. Y siempre recordaré que era la única de las tres que me caía bien a pesar de todo.


Y con los años y la experiencia se ha convertido en una jovencita absolutamente única y excepcional. Su dulzura sobrepasa los límites de lo permitido, al igual que su bondad; aunque con los años ha aprendido a no dejarse pisotear, no sé si a fuerza de los gritos de Irene para que espabilara o a otros motivos que desconocemos. Y cada día que pasa me sorprende más y mejor, porque cada día es más y más maravillosa, aunque no parezca posible.


Siempre que me pongo a hablar de ellas me quedo corta. Porque verlas crecer ha supuesto mucho para mí. Y gran parte de lo que soy de lo debo a ellas. Y parece que siempre digo lo mismo, pero no quiero que suene a tópico, ni a gastado, porque cada día tengo más claro que las sigo necesitando. Y no es una casualidad que cada vez que empiezo a escribir sobre una de ellas, acabe hablando de todas. Porque a fin de cuentas, somos y seremos siempre un Grupo.


Felicidades princesa

1 comentario:

Aniña (@vampyevil) dijo...

pues felicidades tanto a Lucia como a ti... y animo. si puedo hacer algo por ti no dudes en decirmelo. besitos.