martes, marzo 24, 2015

hastaelinfinitoymasalla


Escaparme contigo del mundo es la mejor cura para cualquier tipo de mal. Porque, aunque ya lo sabía, nunca está de más recordar que si tú conduces, yo podría ser tu copiloto hasta el fin del mundo. Y es que no importan los reveses de la vida o la desgana, mientras queden momentos que podamos guardar en nuestro recuerdo como pequeños tesoros. Porque lo que importa al final, es haber podido compartir un puñado de instantes inolvidables con personas que merecen la pena. Y todos los demás con quien se lo merezca más. Y es que cada vez tengo más claro que no mi único hogar es aquel en el que estés tú, y todo lo demás es secundario. 

miércoles, marzo 18, 2015

martes, marzo 17, 2015

Amiga Soledad



Y es que un martes cualquiera la Soledad puede ser la mejor de las compañías. Porque hay momentos en los que no puedes soportar a la gente que te rodea. Quizás porque tampoco te puedes soportar a ti misma. Y piensas que en esos momentos sólo podrías soportar a un puñado de personas en el mundo, y la mayoría están lejos o muy lejos. Pero, a veces, solo necesitas a una. Y las miradas en silencio son, en ocasiones, la mejor manera de curar la Soledad. Escogida o no. Porque hay personas con las que el silencio compartida es la mejor de las conversaciones. Porque hay personas que significan mucho más de lo pudiera parecer. Porque refugiarse en Soledad no siempre es la mejor opción. Y que nunca falten acordes para acompañar los silencios y la Soledad.

lunes, marzo 16, 2015

Melancolía de café de lunes


Y es que hay días en los que necesitas aliarte con la Soledad,
huir del mundo, de los demás, y hasta de ti misma.

Cuando casi nadie nota que no estás,
cuando quien menos te lo esperas nota que te vas,
cuando ni siquiera tu cuerpo entiende tu mente
y mucho menos al contrario.

Hay temporadas raras
que parece que nunca acaban,
y que cuando lo hacen
siempre vuelven.

Y no hay taza de café que las cure.

miércoles, marzo 11, 2015

Crisis y días grises


Hay crisis grandes, pequeñas, inesperadas, trascendentales.
Hay crisis que parecen no terminar nunca
y otras que te dejan sin respiración.
Casi todas son oportunidades,
pero casi nunca sabemos aprovecharlas.

Hay días grises, llenos de niebla,
hay días negros, rojos y azules,
y otros muchos que tienen un arcoiris.
Pero casi siempre vemos la vida en blanco y negro.

A veces nos despertamos con ganas de comernos el mundo
y otras con la necesidad de pedirle que deje de girar, 
que ya nos hemos cansado 
y yo me bajo en la próxima.

A veces no sabes si lo que te paraliza es el miedo, la ansiedad o el hastío.
A veces la paciencia deja de ser infinita y te deja por los suelos.
A veces las manos siguen frías y el corazón no acaba de calentarse.
Pero siempre, siempre, siempre, hay que levantar la cabeza,
porque no se nos está permitido ser vulnerables.
Ya no.

miércoles, marzo 04, 2015

A lus dun sorriso




Hai sorrisos que alumean unha semana enteira
e nin sequera son conscientes.

Hai sorrisos que che devolven o sorriso
e nin sequera sabes por qué.