lunes, mayo 26, 2008

Gracias

Hoy hemos hablado. Llevo demasiado tiempo mal. Demasiado tiempo callándome a ratos. Necesitaba hablar sin pensar en cómo decir las cosas. Necesitaba que me preguntaras insistentemente: ¿Qué es lo que te pasa? Aunque no supiera contestarte. Aunque supieras que no podía contestarte. Y hablar. Y emocionarme. Y ser capaz de llorar en tu presencia. Como nunca lo había hecho. Y ver cómo te preocupas por mí. Y sentir que mi tristeza te entristece. Y que quieres verme sonreír. Ver como buscas ideas que me animen y/o alegren. Y que intentes devolverme una parte de la ilusión perdida.
Hoy necesitaba un amigo y ni siquiera me había dado cuenta.
Hoy necesitaba un amigo y tú me abrazaste.

7 comentarios:

MoN dijo...

Eso me pasa a mi. Necesitar que te pregunten, que te pasa?y entonces un mar se pone dentro de tu cerebro, con las olas golpeando contra el craneo, y no saber que decir, ni poder pensar, ni como expresar que lo unico que tienes dentro es un gran:

aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

Pues ánimo jubar :(

Anónimo dijo...

ánimo.
apóyate en tus amigos, que están ahí incondicionalmente, contigo.
un beso grande.

César de Centi dijo...

Venga!!!
que no queda nada, un abrazo Fatima!
Nos vemos el viernes.

LaCaja31 dijo...

Es genial cuando alguien te conoce hasta el punto que es capaz de leer tu mirada...Te preguntan y es como sentir que para alguien eres algo! que no eres un ente que ocupa un espacio.

Es que esas personas que cumplen con lo que describes sólo se las puede llamar de esa manera: amigos. Eso sí, con todas las letras!!!

Anónimo dijo...

a todos nos hace demasiada falta todo eso.

:S

Anónimo dijo...

yo no se hacer eso. no puedo

Úrsula